"Diversas formas de expresión en el Arte"
La creatividad se entiende como la posibilidad de mejorar cualitativa y
cuantitativamente la producción de objetos e ideas.
El juego es una postura individual ante los materiales de dibujo o pintura y nos
da cierta capacidad para tener el valor de desarrollar el sentido de producir
cosas originales. Podemos desarrollar la creatividad en la música, en el dibujo,
en la pintura, encontrando estímulos poderosísimos que nos ayudan a crear.
Algunos creen que la imaginación se desarrolla cuando tenemos tiempo libre, esto
es inexacto ya que permanentemente y en todos los actos de nuestra vida, estamos
poniendo en libertad la imaginación y la creatividad.
La persona que incentiva su capacidad creativa y posee una imaginación fértil,
logra abrir un mundo lleno de ideas, ilusiones y proyecciones individuales. A
todos nos ha sucedido que, cuando alguien nos explica o revela algo y “se nos
abren los ojos”, vemos cosas que antes no veíamos, aunque siempre habían estado.
Esto se debe a que lo que deseamos, lo que percibimos y lo que somos capaces de
imaginar está íntimamente entrelazado.
La imaginación y la capacidad creativa, son herramientas que permiten cierto
grado de maniobra, cierta independencia frente al mundo en que vivimos.
La creatividad nos otorga la posibilidad de modelar las circunstancias o los
hechos de manera más favorable para la propia evolución.
Enriqueciendo el mundo imaginario, dándonos herramientas para incentivar la
creatividad, se logra ir más allá de producir más y mejor; se puede lograr que
la actividad, al ser más creativa, sea más agradable, ya que es algo que
responde al deseo de libertad y al impulso inherente a todo lo que está vivo.
Las personas crecemos y nos desarrollamos dentro de un mundo que imaginamos como
natural y propio para nuestra vida.
En ese imaginario están dibujadas todas las cosas que creemos que se pueden
hacer y las que no. Ahora bien, cuando un hombre o un niño decide dibujar y
comienza en sus primeros pasos, es ahí donde comienza a desarrollar su
imaginación y es su mundo interior el que se va plasmando; no es la imagen real,
ya que no sabe racionalmente pintarlo o dibujarlo, sino que debe permitir
equivocarse para que la creatividad ayude a plasmar esa ilusión.
En cada dibujo, cada cuento, la mente crece, gana en plasticidad para relacionar
datos o concebir nuevas ideas. Se modela y va generando ideas individuales que
ayudan al desarrollo de la personalidad.
Entonces, trabajar en el desarrollo de la creatividad es trabajar en ese
imaginario individual, de manera de desarrollar pautas ante una imagen que,
dentro nuestro, es una imagen ideal.
Lo que sirve para incentivar la creatividad de uno, no sirve para el otro; hasta
en eso somos individuales, no a todos nos gusta dibujar, a algunos les gusta
jugar al tenis y a otros bailar. Lo principal es mantener la individualidad en
todos los campos que se desarrollen.
Incentivar el desarrollo de la imaginación y la creatividad es una tarea
difícil, ya que algunas formas de expresión logran realizarse a través de lo
imaginario o de la fantasía, y de la mayor o menor creatividad que el individuo
se permita tener.
La importancia de ser creativo no radica solamente en que se pueda producir más
y mejor, sino en que permite a la persona desarrollar plenamente su potencial,
cualquiera sea su elección de trabajo, en especial dentro de las artes.
El que juega a cambiar finales de cuentos o poner colores de manera no
convencional, va descubriendo que en la vida también hay libertad y maneras para
modificar aquello que estaba predeterminado. El juego creativo se convierte así,
en cada persona, en un ejercicio que va a beneficiarla en todos los órdenes de
la vida. © 2004
Susana Weingast
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