"Diversas formas de expresión en el Arte"
Al percibir el color en una obra de arte, ya sea al plasmarlo como al
observarlo, entran en juego nuestras propias vivencias y sensaciones, inclusive
evocaciones.
El color en la pintura de un cuadro, los valores o modulaciones, los acentos que
lo profundizan, hace que el espectador pueda leer el cuadro, igual que un
escrito.
Las distintas funciones son:
- Informar la presencia de un objeto en el cuadro. Se lo puede ver vibrar o
pasar desapercibido según el color utilizado y según su textura.
- Puede ser un color variado por diversas iluminaciones, dando así una función
estética, especialmente en la pintura figurativa.
- Como el color es portador de significaciones, nos provoca emoción, sensaciones
diversas dentro de su ubicación correcta en el plano.
- El fondo de color plano o liso, sin objeto, como zona de descanso, hace que la
visual del observador descanse, sea cual fuere el color utilizado.
- Es necesario que el artista ubique el mismo color, tanto en la figura como en
el fondo, en las proporciones deseadas por el autor.
La individualidad de la forma y la individualidad del color, poseen entre sí una
interconexión expresiva y está relacionada con cada persona, dependiendo de su
preferencia, edad, sexo, estado emotivo, personalidad, experiencia y cultura.
El color es uno de los medios que utiliza el artista para expresar y construir
ideas a través de las imágenes, ya que se expresa de manera no verbal.
Según el orden que se utilice, en su forma de aplicarlo en el lienzo, basándonos
en las distintas proporciones del color, las combinaciones del mismo y del
simbolismo del espacio, logra el creativo artista una manera, un modo, para la
combinación, impacto, estrategia, según lo que desee transmitir, y se repite en
una constante en la evolución de la obra de ese artista a través de los años.
El camino ideal, es ir de lo intuitivo a lo conceptual, a través de la
investigación, descubrimientos y teorías, no sólo generales sino individuales.
Al realizar un paisaje, el color es el protagonista del espacio, de la
atmósfera. También lo son las formas y los movimientos horizontales - oblicuos
de lectura. Existen en el paisaje elementos que constituyen la materia a
elaborar: el agua, el verde, la tierra, el cielo, las nubes.
A todo esto hay que sumarle las impresiones o expresiones afectivo-emotivas que
acompañan a las estructuras del dibujo y del color.
Estas interacciones o simbolismos en la ejecución de un paisaje, producen
sensaciones diversas en el espectador en cuanto al color elegido, en cuanto a la
atmósfera, a la textura y a la luz.
El artista logra exaltar la calidad en la composición de todos los elementos,
valiéndose de materia, grafismos, colores, texturas, luces y sombras, aguadas,
transparencias, etc.
Un mismo paisaje puede ser ejecutado al mismo tiempo por muchos artistas, y cada
uno lo hará de manera distinta, siempre valiéndose de los elementos mencionados.
© 2013
Susana Weingast
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